Anoche tuve un sueño mega dual que tiene dos parte. La primera, es un señor que cuidaba a un ave para que sanara, y creyendo que ya había sanado la suficiente la intenta soltar para que vuele libremente, esta ave lo intenta pero le cuesta agarrar vuelo, el señor confía en el ave, y la sigue empujando para que sea libre, pero el ave al no agarrar vuelo, termina cayéndose en un hueco más profundo, donde se le hace más difícil volar.
El sueño cambia de escenario y ahora estoy con Pino, mi gato, lo tengo entre mis brazos porque la ventana está abierta y la calle da a un sitio desconocido, yo no quería soltarlo hasta que se cerrara la ventana porque no quería que se perdiera, aunque Pino quería salirse de mis manos para irse corriendo hacia ese lugar desconocido.
Me desperté con curiosidad, en los dos sueños se presentan escenarios similares pero en dinámicas opuestas: dos animales, uno que buscan liberar, un ave que suele simbolizar el espíritu, pero es muy pronto para que agarre vuelo; y otro que quiere ser libre, un gato que suele simbolizar el instinto, pero por protección no se lo permiten. Ahí mismo me pregunté, ¿qué parte de mi necesita tiempo para volar, y cuál otra ya está lista para ser libre y no se lo estoy permitiendo?
Les cuento este pequeño fragmento de mi psique, porque está dualidad es la que se hace presente en Luna Llena, no sé sí sabían, pero la Luna Llena se da en un aspecto que se conoce como oposición (cuando dos Planetas se encuentran en signos opuestos a 180 grados de separación), en este caso, el Sol en Capricornio se opone a la Luna en Cáncer, y por eso la ilumina por completo, presentándose así dos polaridades: la solar que tiene que ver con la esencia y lo consciente; y lo lunar que tiene que ver con el instinto y lo inconsciente.
Las Lunas Llenas nos ponen en esa tensión de opuestos, donde nuestra sensibilidad aflora y elementos del instinto se hacen más presente: la emoción, intuición y mecanismos de protección; pero a la vez se expone en el escenario de lo solar: ¿qué vamos a hacer con toda esta emocionalidad en un mundo que pide más racionalidad y una cotidianidad que transitar?
Entonces entramos un poco en conflicto al contactar con lo lunar, porque ella es enigmática, y su luz no se suele revela con claridad. Así como ella se me hizo presente en ese sueño, a través de imágenes oníricas mostrándome su resultado, y que si les soy sincera, todavía me cuesta entender por donde viene esta información; tal vez a ti se te presenta en ese palpito que revela recuerdos que no sabes porque tu mente proyecta en estos momentos, o a través de una canción que movió cada fibra de tu ser, mostrándote una sensación que necesitabas exteriorizar.
Pero, ¿qué sentido tiene esto para la razón?, tal vez, en este momento ninguno, pero tiene todo el sentido del mundo para el alma que su lenguaje es la intuición.
Les traduzco esto de esta forma, porque siempre que hay Luna Llena y leemos que es un momentos de cierre de ciclos, de ver resultados y agradecer por lo que se revela, no siempre se tiene tan claro lo que ella refleja, porque su contenido se mueve en nuestro lado más instintivo, son las respuestas del alma, y ella no responde de forma objetiva o clara… pero si a un espacio seguro, que acobija nuestros adentros y lo inyecta de sensaciones y emociones, que si las permitimos ser, algo en nosotros hace click y se llena de sentido: nos sentimos contenidos.
Por eso su energía se vive desde lo ritualista, de crear ese espacio seguro, de escucha, donde a través de la meditación, la escritura o la danza… cualquier expresión en la que quiera aflorar el alma, para así permitirnos recoger los frutos que su contenido nos regala.
Somos una sociedad que aplaude lo solar: la productividad, el éxito, los resultados… entonces cualquier práctica que no refleja productividad lo solemos dejar a un lado porque hay que correr a los resultados, todo lo queremos saber, entender y si no lo logramos, lo dejamos a un lado. Y ahí le lanzamos un puñal por la espalda a nuestra alma, por no permitirnos confiar en aquello que no hace falta entender, pero es real en nuestros adentros, y que solo pide ser escuchado. Un poco como en mi sueño cuando querían empujar el ave para volar, cuando necesitaba tiempo para sanar.
En esta semana de Luna Llena, en vez de buscar resultados tangibles, respuestas claras y puzzles resueltos, regálate el espacio de construir tu propia comunicación con tu alma, aquella que te lleva a viajar a tus adentros, y te da el piso para sentir lo que necesitas sentir, y quien sabe… tal vez sale algo mágico de ese encuentro. Y así como Pino, dejar de retener nuestro instinto, y confiar más en lo que pide explorar.
La Luna Llena en Cáncer es una energía que nos pide volver a casa, a nuestro lugar seguro, y desde ahí sentir las raíces que sostienen la vida de nuestra esencia, para saber qué es realmente lo que nos nutre y saber desechar lo que nos desnutre.
Apapachos, cariñitos, y mucha contención en esta energía lunar, esta semana no seas tan dura contigo, y regálate los mismos que necesitas para sentirte segura y atendida contigo misma.
Aquí con Pino entre mis brazos (por elección propia jeje),
Con cariño, desde mi Luna, Pao!
Gracias Pao ❤️
Me encanta encontrar la iluminación de la astrología, acerca de lo queueven las lunas llenas y como lo muestras para que sea fácil de comprender, me encantas Pao en la luna.